Una piedra en el camino

La situación que vivimos me recuerda una práctica popular en el campo que aunque incómoda y cuestionable no podía ignorar. Los 28 de diciembre se celebra en algunos países el día de los inocentes, es una fecha que tiene un origen religioso pero se ha convertido en un día en que jugarle bromas a los demás es culturalmente aceptado. El sentido del humor es bastante relativo y la práctica a la que me refiero jamás me ha parecido de buen gusto, en realidad todavía me causa cierto rechazo. Sucedía, no sé ahora, que en la única carretera que conectaba el pueblo con las fincas y otro pueblo, ese día aparecía atravesada una piedra enorme, o un tronco, algo que afectaba por completo el flujo vehicular acostumbrado. Dependiendo del tamaño del obstáculo los vecinos actuaban o no y no se sabía en realidad quienes se tomaban el trabajo de hacer algo que sin lugar a dudas causaba malestar, en vez de risa. Los 28 de diciembre entonces muchos evitaban salir porque anticipaban el problema, otros, que no podían abandonar sus actividades, tendrían que lidiar con “la broma”, unirse para quitar el obstáculo, o llamar a las autoridades para que actuaran si la fuerza comunitaria no era suficiente. Ambos movimientos humanos podrían haberse evitado, pero en ese momento eran reales y era necesario actuar.

Desde mi perspectiva de niña, a ese culpable invisible se le tenía temor, parecía que había que acostumbrarse a él a pesar de los efectos secundarios, que no tuviera cara y que las únicas opciones para sobrellevarlo eran evitarlo o quitarlo. No era un día alegre para mí, en realidad aburrido, lleno de zozobra y de alguna manera el día en que había que mirar con lupa lo que viniera del exterior, de los vecinos, de mis primos o tíos. El pásela por inocentes, era para mí un baldado de agua fría luego de confiar en la palabra o acciones de los demás y lo único que me generaba era decepción personal. A lo largo del día y con los años, la estrategia entonces era dedicarme a las cosas que más disfrutaba para sobrellevar la fecha de la mejor manera, mantenerme dentro de mi círculo familiar de confianza, disfrutar de la creatividad de los que usaban la fecha para llevar alegría y confiar en las personas que tenían la autoridad para manejar la situación externa que nos afectaba a todos.

Por supuesto, la situación de ahora es muy diferente, no sabemos cuándo será el 29 de diciembre, cuando la piedra ya no esté allí, pero cada día es una oportunidad para aceptar con compasión la zozobra, nuestras posibilidades de contribuir al bien general y al mismo tiempo, para descubrir posibilidades individuales de honrar cada día. Hay ideas esperando ser descubiertas o renovadas.

Eso ocurrió hace unas semanas al revisar algunos de mis objetivos, tal vez como resultado de la confusión interior al recibir la confirmación de que una puerta a la que había tocado, por la cual trabajé y pensaba abierta, resultó que no. No estaba segura de cómo sentirme, ¿feliz o triste?.

Una semana después se anunció el aislamiento.

En unos papeles que había escrito hace unos años me alegró ver cómo estoy atravesando un camino borrador que tracé en ese entonces, y al mismo tiempo, cómo algunas metas o ideas estaban pidiendo actualización y claridad.

Como resultado de ese ejercicio liberé un ítem de una lista de cosas para hacer, al darme cuenta que no estaba convencida de mi motivación real, que no era la única manera de dirigirme hacia mis metas y sí me generaba presión cada vez que lo veía acumularse. Atribuyo esa acción a lo que sucedió después. Como resultado de la pandemia se han activado las reuniones virtuales y por esos días respondí a una convocatoria informal en un grupo de desarrolladores sobre temas de las mujeres en tecnología, respondí con una propuesta y extrañamente no me sentí intimidada sino que preparé mi intervención con alegría y autenticidad. Desde ese entonces asumí un rol voluntario que siempre había visto lejano, para el cual me siento preparada y que ahora disfruto como Co-organizadora de Women Techmakers Nuremberg. Hemos tenido y tendremos asistentes maravillosos y le atribuyo esta posibilidad a permitir dejar entrar a mi vida oportunidades nuevas que se alineen con mis objetivos.

Durante este tiempo también me he sentido muy conectada con la comunidad y he producido nuevo material en el canal que espero disfrutes:

Ama tu niñ@ interior - Meditación recomendada para la noche
Disuelve tu ansiedad - Marco teórico y meditación para sobrellevar la ansiedad tanto de las emociones acumuladas como de las emociones anticipadas.
Nadie se inscribió para esto - Cinco principios para adaptar tu vida durante el aislamiento
En casa - Meditación matinal- Una práctica para ver y apreciar el lugar que te acoge

Serie sobre inteligencia emocional:
Inteligencia Emocional 01
Conciencia Emocional Individual
Gestión Emocional Individual

Los próximos capítulos serán sobre la conciencia emocional social, y la gestión emocional social. Por otro lado, quedan dos días para disfrutar gratis de algunos audios de la cumbre de Hay House “Puedes sanar tu vida” (30 de Abril al 14 de Mayo), is no lo has hecho, aún puedes inscribirte y acceder a este material (en inglés) Y hasta el 21 de Mayo puedes comprar todo el material del evento.

Estos son los enlaces para la opción que elijas.

Inscribirse a la cumbre “Puedes sanar tu vida”
Comprar contenido de la cumbre “Puedes sanar tu vida”

Feliz días todos los días,
Dennise

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